Una vida nueva

Hola, hola! Uff. Cuanto tiempo sin pasarme xD

Pues, hoy les eh traido una de mis más recientes creaciones =D

Un fanfic, Obviamente Contestshipping.

El resumen completo: Drew y May estan casados y tienen un hermoso hijo. El problema es que no hay persona que se salve de las peleas cotidianas entre parejas... Un cierto día, una pelea demasiado acalorada hará que toda la familia entre en conflicto. Y desde ese momento cierto pokemon que nosotras conocemos bien de la película Pokemon el príncipe del mar. Intervendrá haciendo que esta pareja se de cuenta de lo difícil que es llevar la vida del otro...

¿Cómo terminara?

Capitulo uno: El despertar.

Otro día, de nuevo. La misma rutina…

En un lugar un poco apartado de la civilización, en una hermosa casa estilo castillo. Bastante grande pero acogedora. En las múltiples habitaciones se encontraba una en particular. La recamara más grande de todas, la más hermosa y mejor decorada. Por supuesto la habitación de el señor y la señora Larousse.

Se encontraba una castaña de unos hermosos ojos azules, envuelta en aquella fina sabana. No quería despertar. Se le hacía muy difícil, ¿por qué? Porque sabía que su día iba a ser difícil.

Escucho como se abría el grifo de la regadera. Seguramente, por no decir obviamente, su esposo se preparaba para otro día laboral. Lo mejor era desperezarse de una buena vez. Y con casi todo el esfuerzo del mundo se levanto de un tirón de la mullida cama, que a esa hora y en ese estado le parecía el lugar más delicioso del mundo.

La misma rutina…

Salió de su habitación al pasillo. Camino hacia la cocina, bajando las escaleras, no sabía con seguridad que prepararía esa mañana. Algo se le tenía que ocurrir, opto por un desayuno completo: Huevo, tocino, tostadas, algún cereal, café y por supuesto jugo de naranja. Preparo todo rápidamente. Cuando escucho como alguien se cercaba por el mismo lugar del que ella entro. Empezó a poner la mesa.

-Buenos días, mi amor –Entro diciendo el hombre de no más veintiocho años mientras entraba a la cocina y le daba un beso a la mujer.

-Buenos días, cielo –Le respondió mientras seguía sirviendo el desayuno.

-¿Se ha levantado ya, Shuu? –Pregunto el peli verde mientras ayudaba con algunos platos.

-No, quise dejarlo dormir unos cuantos minutos más hoy –Respondió sonriendo mientras se quitaba el bonito delantal rosa y se encaminaba hacia la habitación de su hijo. Otra vez, subiendo las escaleras y caminando hasta la última habitación del pasillo en la segunda planta.

Entro sin querer hacer mucho ruido, camino hasta la cama de su hijo. En el trayecto tuvo que cuidar de no pisar ninguno de los numerosos juguetes esparcidos. Se acerco a la cama y se arrodillo frente a una figura envuelta.

-Shuu, cariño. Despierta. –Decía dulcemente mientras mecía el pequeño bultito.

-¿Mami? –Susurro el niño mientras abría sus ojos para enfocar la figura de su madre.

-Bebe, tienes que despertar. Ya es hora –Le dijo dándole un tierno beso en su frente.

-Cinco minutos más… -Pidió el niño más dormido que despierto.

-¿En dos? –Cuestiono divertida su mamá.

-¿Cuatro? –Respondió/Pregunto el niño ya mas despierto.

-Tres, y es mi última oferta –Dijo ya divertida levantando a su hijo quien ya estaba plenamente despierto –Bien, a bañarse. –El pequeño era el vivo ejemplo de su padre, con los ojos de su madre. Cinco años apenas y ya se le notaba algo de carácter, aunque como todo niño de esa edad, dependía plenamente de esa mujer protectora que estaba para él 24/7.

-Mami, yo me puedo bañar solito –Le indico el niño haciendo un puchero.

-Tranquilo, tranquilo –Le respondió la castaña haciéndole una caricia contra su nariz –Tu solo me dices cuando ya estés listo ¿Ok?

-¡Sí!

Cuando hubo dejado a su hijo en el baño, para que se las arreglara “solo” (Le preparo la tina, le indico la cantidad de shampo, acondicionador, jabón. También calentó el agua y le ayudo a desvestirse. Sin mencionar que también lo metió al baño y le froto casi todo el cuerpo) Pero claro, su hijo ya sabía bañarse “solo”.

-Estará aquí en poco tiempo –Menciono la oji azul mientras entraba a la cocina nuevamente. Donde el oji verde estaba bebiendo café y tomaba su portafolio. -¿Ya te vas? –Le pregunto al verlo ya de camino.

-Es que me acaban de llamar porque tienen un problema con un empleado nuevo –Respondió seriamente. Quien era ahora el dueño de casi toda la ciudad Larousse, gracias a su padre quien le había heredado su empresa de Acciones Larousse & Co.

-¿No te vas a despedir de Shuu? –Cuestiono algo triste.

-Lo siento, amor. Realmente tengo que ir, pero ya lo veré cuando regrese de la oficina ¿Si?

-Ok… Por lo menos deberías comer algo –Le aconsejo.

-Tranquila, en el camino comeré algo. Bien –Se acerco a ella y le dio un beso fugaz para luego irse por la puerta.

Otro día igual, la rutina de siempre.

///Ese mismo día en la noche///

-Familia, ya llegue –Anuncio el peli verde mientras entraba a su hogar y se intentaba zafar el nudo de la corbata.

-¡Papi! –Corrió el niño a sus brazos. Donde, acto seguido, lo levanto por los aires en forma de juego.

-Shuu, ¿cómo esta mi hijo favorito? –Pregunto en forma de broma el hombre.

-¡Papi! Soy tu único hijo –Dijo el niño como si fuese lo más obvio del mundo para luego reír.

-Y dime, pequeño ¿Dónde está tu madre? –Cuestiono ya tranquilo mientras lo bajaba.

Y el niño salió corriendo hacia la cocina riendo mientras gritaba: “Aquí, Aquí”.

El hombre siguió a su hijo hasta la cocina, donde estaba ya ella preparando la cena.

-Mami, papi ya llego –Anuncio el niño como si ella no se hubiera dado cuenta.

-Gracias, cariño. Voy a saludar a papá –Agradeció mientras hacia su típica caricia con la nariz y se levantaba para saludar a su esposo mientras le daba un apasionado beso -¿Qué tal estuvo tu día, cielo?

-Bastante bien, al final solucione el problema con el empleado nuevo –Respondió el oji verde mientras se sentaba en la mesa, para comer.

-¿No lo despediste, cierto? –Cuestiono la castaña. Conocía demasiado a Drew. Sabía que era capaz de eso y más.

-No, claro que no. A quien si despedí fue al jardinero. –Menciono con simpleza.

-¿Qué? –Pregunto algo alarmada la única mujer de la casa –Drew, era el único que sabía cómo me gustaban los arboles.

-Sí, pero corto las rosas. Y yo le había dicho mil veces que no cortase las rosas –Se defendió el peli verde.

-Debiste consultármelo –Dijo la castaña mientras fruncía el ceño.

-Bueno, no es una decisión que necesariamente debamos tomar los dos –alego el hombre pensando que su esposa no lo veía como auto-suficiente para hacer cosas por sí mismo.

-Sí, pero te recuerdo que ha ese jardinero lo contrate yo –Espeto la mujer un poco más molesta –Además, donde vamos a encontrar a un profesional de su calibre para antes del sábado. Porque te recuerdo que ese día es nuestra fiesta de té.

-Por favor, soy Drew Larousse. Puedo conseguir a quien yo quiera, en el momento que yo quiera –Rebatió mientras se levantaba de su asiento. Pues esa conversación por muy tonta que pareciese, luego de un día laboral como el suyo ya lo habían dejado cansado.

-¿A dónde vas? –Interrogo la chica.

-Ya no tengo hambre –Contesto mordazmente mientras abandonaba el lugar.

Luego de la discusión de la pareja, mientras lamentablemente el niño escuchaba. Ambos se sentaron solos a cenar, en un silencio que la castaña sintió por su hijo. Quien no se había atrevido a mediar palabra desde que los vio pelear y también mantenía su cabeza gacha.

///Más noche en la recamara de la pareja///

-Solo digo que si me hubieses dicho, eso jamás habría pasado –Argumento la mujer, luego de ya haber empezado una calurosa discusión con la cabeza del hogar.

-Pues yo solo digo que es una estupidez por lo que te enojaste, es un simple empleado. ¡Por Dios! Además, no tenías porque replicármelo frente a nuestro hijo –Añadió molesto el peli verde mientras se sentaba en su cama y se quitaba los zapatos.

-Pues entonces, señor perfecto. Intenta no enojarme cuando estemos frente a nuestro hijo –Replico aún más molesta la mujer.

-¿Sabes qué? No pienso continuar con esta discusión, es absurda. Y para tu información, estoy muy cansado y lo último que quiero es venir a mi casa a pelear, con la mujer que se supone debe apoyarme en todo.

-¿A Sí? Pues no creas que eres el único que se esfuerza en esta casa. Yo también hago mi aporte. Y te puedo asegurar que no sobrevivirías ni un solo día en mis condiciones –Objeto muy molesta.

-Por favor, podría estar más de una semana haciendo lo que tú haces sin cansarme. Tú eres quien no estaría ni un día en mis condiciones.

-¡Se acabó! Te vas a la habitación de huéspedes –Puntualizo la mujer mientras le arrojaba una almohada y una sabana en la cara.

-Me voy porque quiero no porque me lo digas –Respondió mientras se levantaba y se iba.

Justo cuando cerró la puerta dio un largo suspiro, era cierto. A veces peleaban, todas las parejas lo hacen pero el estrés de ese día en particular y el descontento justo antes de la cena había roto la delicada armonía que existía y tal vez, solo tal vez. Ambos se habían pasado un poco de la raya.

En esos momentos existía una gran tención en la familia. Lo peor era que no solo en los padres, sino también en el pequeño Shuu quien había escuchado toda la pelea.

Entonces un pequeño deseo de todos se despertó al mismo tiempo, justo antes de dormir.
El de la madre: Que su esposo entendiese lo difícil que era ser ella.
El del padre: Que su esposa entendiese lo difícil que era ser él.
Y el del hijo: Que sus padres no peleasen más.

Y en un remoto lugar, muy, muy lejos de allí. Varios cientos de kilómetros en el fondo del mar, dentro de un castillo. Dormía un pequeño pokemon tipo agua que escucho todos aquellos deseos. El de su “madre”, el de su “padre” y el del que aparentemente era su hermano. Con su fina habilidad de intercambiar almas. Hizo algo de lo que seguramente no se arrepentiría…


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Ok, Hasta aqui el primer capitulo. Espero que les haya gustado leerlo, tanto como a mi me gusto escribirlo. Y pues, si les gusto espero sus reviews =) creanme. Es más emocionante de aqui en adelante.

Luego subo la conti. Ciao!! =)

Owwww me gusto! =)
Te daría un mensaje mas corto pero mi cél es basura xD

Hola, hola! Gracias por sus reviews

Y pues acá les traigo el siguiente capi. SOLO para aclarar!!! Lo de la discusión justo luego del cambio de cuerpos lo vi muy trillado por lo cual decidí omitirlo. Pero esto no tiene irrelevancia alguna en la historia.

Sin más que decir: palabras, lectura y ¡Acción!


Capitulo dos: ¿Agendas?

Un leve brillo entro por la ventana, era muy, muy suave pero lo suficiente como para que la mujer supiese que era temprano y debía empezar con su rutina diaria.

Se levanto, pero… Algo no cuadraba. Se sentía extremadamente pesada. Como si llevase unas cuarenta libras más de lo normal, también sentía hasta algo de vértigo… ¡Ni con sus zapatos de tacón más altos, alcanzaba esa altura! Pero había algo aún más extraño, ¡No estaba en su habitación! Instintivamente miro sus manos…

Alguien entro rápidamente por la puerta, era… ¿Ella? ¿Cómo era eso posible? Si ella… Pues era ella, o podía haber nadie más idéntico a ella. A menos de que estuviese soñando ¡Claro! ¿Qué otra explicación tendría?

La “Otra” persona camino hacia donde se encontraba con una cara sorprendidísima. May palideció, sintió mareo y se puso completamente helada cuando “Su otro yo” le toco el hombro y lo pudo sentir perfectamente.

-¿Quién eres tú? –Pregunto rápidamente mientras daba varios pasos hacia atrás con mucha dificultad.

-Eres… ¿Yo? –Cuestionó la otra persona mirando estupefacto –Mi amor… ¿Eres tú?

-Drew… -Susurro la chica mientras abría sus ojos desmesuradamente.

///30 minutos después///
-¿Entonces, me estás diciendo que solo amaneciste y ya estabas así? –Volvió a recopilar el hombre atrapado en el cuerpo de su mujer –Me paso exactamente lo mismo.

Claro, se habían tranquilizado luego de varios sustos de muerte, mucho llanto, una que otra interrogación y por su puesto un par de toques a lo que había sido en algún momento su cuerpo.

-S… Si –Respondió la mujer mientras respiraba profundamente. Aún no podía asimilar el haber despertado en el cuerpo de su esposo.

-¿Qué vamos a hacer? –Se cuestiono a sí mismo.

-¿Cómo que qué vamos a hacer? ¡Buscar ayuda! Un especialista, brujería, ¡Hasta un exorcista si hace falta! –Inquirió ella histérica.

-¡¿Estás loca, mujer?! –Pregunto molesto – ¡Esto no es normal! No podemos andar por allí divulgando esto –Esta claro recordar que el vivir en un mundo en el que los humanos reciben choques eléctricos, son golpeados, cortados, quemados, apaleados y por supuesto psico-cambiados. La situación se podía asimilar un poco… -Lo mejor, es descubrir cómo es que terminamos así. Y lo más importante… Por qué –Respondió utilizando como siempre su característica frialdad al pensar “el” peli castaño.

Ella de un momento a otro intento recuperar la compostura. Y en un momento de lucidez pensó:

-Espera… Recuerdas, ¿lo de anoche? –Interrogó a su marido.

-Este… Si. Por cierto, te quería pedir perdón. –Contesto sinceramente “él”.

-Sí, porque imagino que luego de pensarlo, te diste cuenta que llevar mi agenda no es nada fácil.

-¿Qué? No me refería a eso, estaba hablando de lo de despedir al jardinero sin tu consentimiento.

-¡¿Cómo?! Drew Larousse ya me canse… Es obvio que esto es alguna clase de prueba, para que te des cuenta de que no es nada fácil ser lo que soy. ¡Soy mujer, esposa, madre y mucho más! –Respondió molesta la ¿peli verde?

-¡Ja! Si alguien debe darse cuenta de lo difícil que es la vida del otro aquí eres tú. ¡No sabes lo que es tener que lidiar con tantos problemas! –Rebatió también molesto.

-¡Ya estuvo! Es seguro que esto es una prueba! ¿Y Sabes qué? Señor perfecto. Te apuesto a que no duraras mucho en mi puesto.

-¿A sí? Pues yo te apuesto a que tu no duraras mucho en mis condiciones. –Dijo mientras ponía su mano al frente. La cual la peli verde no dudo en estrechar. Era oficial, esto era la guerra.

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Sorpresa!!! Este capi no me gusto mucho así que decidí darles un regalito y subir el capitulo tres de una vez =)

Espero que también les guste:


Capitulo tres: Ser ella.

Ya estaba hecho. Si querían saber lo que era “ponerse en los zapatos de otro” podían lograrlo. Y él, como siempre había sido de lógico, sabía que no siempre lo que fácil viene fácil se va.

Así que ambos se habían entregado la agenda del otro. Claro, no sin antes hacer unas anotaciones extras muy importantes.

-May, apresúrate por favor. Ya debería estar en mi oficina –Remarco impaciente.

-De eso nada, si esto realmente es una señal de que debemos aprender a considerarnos como cónyuges que somos, debemos tomar al pie de la letra la vida del otro –Respondió segura de sí misma –A menos de que creas que no puedes hacerlo –Añadió con un tono burlón la de ahora cuerpo masculino.

-Ya te lo dije, ¡No podrás con todo eso! Créeme, en ese lugar todos parecen Beautifly, pero si te descuidas un momento se convertirán en un Murkowr (recuerden que este es el pokemon cuervo según el anime/Juego) –Le indico seriamente. Luego dio un largo suspiro al ver que su esposa no cambiaría su opinión –Solo… No permitas que te lastimen ¿Si?... Suerte.

Ante esto ella no pude evitar volver a sentir aquel bello sentimiento de protección que su esposo le profesaba.

-No te preocupes, además. Suerte a ti, créeme la necesitaras más –Dijo para luego terminar de entregarle su agenda –Por cierto, vas tarde para hacer el desayuno –Menciono para acto seguido salir de la habitación en dirección al baño.

-Hoy, será un día largo… -Susurro él.

///En la cocina///

6:30 –Desayuno.

Se podía apreciar a una peli castaña en medio de un tremendo desorden, había comida arrojada a la basura, ya que esta la había vuelto incomible, sartenes en llamas y varios platos rotos.

Cuando la oji verde llego al lugar, ya vestida con su traje como lo haría su marido. Vio el tremendo caos en el lugar, rápidamente tomo el extintor y apago las llamas.

-¿Qué sucede con tigo? ¿Nunca habías cocinado nada? –Pregunto molesta.

-No me regañes. Tenía mucho de no hacerlo, además. Tú con estos brazos tan cortos no llegas a ningún lado. Y con estas manos tan pequeñas hasta las cucharas me dan trabajo para sostener.

-¡No tengo manos pequeñas! Además, yo que recuerde no he tenido problemas con la comida jamás, desde que estamos casados. –Puntualizo convencida –Y un consejo, Drew. Si no sabes cocinar, solo hubieras sacado la leche de la nevera y servido con un poco de cereal.

El hombre tardo un poco en darse cuenta de que estaba en lo correcto. Molesto decidió no seguir con la discusión.

La peli verde suspiro, su esposo podría ser un hombre de inteligencia extrema, pero carecía de sentido común –Esta bien, pero que no vuelva a ocurrir. Ve a despertar a Shuu mientras yo limpio este desastre lo más rápido que pueda ¿Si?

“Él” solo asintió y se fue rumbo a la habitación de su hijo. Un desastre completo. Entro de forma brusca y al momento de hacerlo piso por accidente un carrito de juguete que se encontraba tirado. Haciendo que el pobre Drew callera sobre una pila de juguetes bastante duros, causándole un terrible dolor en su espalda. Por el ruido que hizo sin querer, despertó al niño. Quien por haberse asustado tanto empezó a llorar.

-¡No, no, no, no, no! Campeón, deja de llorar –Pidió desesperado.

Pero era en vano su bebe lloraba a todo pulmón, la razón era que había tenido un mal sueño debido a la pelea que había presenciado el día anterior y el hecho de que lo despertasen con tremendo susto no había mejorado las cosas en nada.

May, entro corriendo a la habitación, esquivando profesionalmente todos los juguetes como si se tratase de un deporte olímpico. Para acto seguido cargar a su hijo en brazos, abrazarlo y empezar a mecerlo.

-Ya, mi niño. Ya… Tranquilo, mami esta aquí. –El niño dejo de llorar, pero no por el hecho de la suave voz que le hablaba, sino, el que su PADRE le estuviese diciendo que “mami” ya estaba allí.

-Eh, ¿papi? –Pregunto algo desconcertado el pequeño, también por el hecho de que su padre, jamás, pero nunca. Lo había cargado de aquella forma tan… maternal.

-Ah… ¡Quise decir papi! ¡Si eso! Papi ya está aquí –Añadió rápidamente intentando enmendar su error.

-Mami –Susurro el pequeño Shuu con los ojos vidriosos mientras estiraba sus bracitos hacia la dirección de su figura maternal.

Drew rápidamente se acerco a ambos para luego intentar por todos los medios posibles, recordar la posición exacta en la que su esposa cargaba al primogénito.

-¿Mami… Te encuentras bien? –Cuestiono el niño al sentirse incomodo con la postura en la que lo sostenían, ya que, sin querer, lo estaba apretando de una de sus costillas.

-A, ah… Es que, mami se lastimo su espalda, este… ¿Bebe? –Ahora si era un hecho. Drew se había pasado los últimos cinco años desinteresado de la relación madre e hijo. Ya que no conocía ni como su esposa llamaba habitualmente a su hijo.

-¿Te duele mucho? –Pregunto el bebe más interesado en la salud de su madre que en él mismo, lo cual sorprendió al mismo Drew.

-No te preocupes, campeón. Mamá estará bien –Esta vez fue May quien respondió, mientras le daba una mirada fugaz a su esposo. Para luego salir de la habitación, no sin antes susurrarle al peli castaño que era la “hora del baño”…

///20 minutos después///
May, en el cuerpo de Drew por supuesto, ya se había marchado rumbo a su oficina. Y su hijo por otro lado, ya estaba bañado y listo para ir a su kínder. Lo último por cierto, había sido toda una osadía. Pues el baño había salido realmente mal, ya que al pobre Shuu le había caído jabón en los ojitos y se había puesto a llorar por el descuido de su madre (Padre). Luego, a Drew se le había olvidado planchar el uniforme del pequeño y se lo había tenido que retirar para hacerlo, se había tardado mucho también. Además de haber desayunado.

Hasta que por fin, ya iban en la minivan. Lo cual le molestaba. Porque se suponía que la minivan era de May. Y el deportivo negro era el suyo. Leyó de nuevo lo que ponía en la agenda.
Agenda: “7:30 –Dejar a Shuu en el Kínder”

¡Genial! Ya iba retrasado. Luego de pedir disculpas por el retraso y dejarlo. Prosiguió a leer lo que seguía.

Agenda: 8:00, 8:30 –Limpiar la casa

///En su casa///

Él lo recordaba, se lo había repetido como un millón de veces: Contratar por lo menos una criada, pero era ella quien se oponía rotundamente a que un desconocido tuviese acceso a su hogar. Antes no habías problema, tenía cinco sirvientas. Pero desde la llegada de Shuu, ella se mostraba totalmente negativa a que alguien que no fuese ella o su esposo pudiese acercarse a su hijo.

Y ahí estaba… Tendió las camas, paso la aspiradora, saco la basura, lavo la loza, cambio las toallas, uso el paño en la cocina, sacudió el polvo, lavo los platos, lavo la ropa; Limpio todos los estantes, mesas y superficies… Y muchos más. Lo que más le sorprendió de todo es que eso estaba agendado en la sección de “Actividades DIARIAS” ¿Cómo era posible? ¿De dónde sacaba que podía hacer todo eso en media hora? Por simple curiosidad reviso lo que tenía que hacer de “extracurricular” en la semana, cosas como: Hacer las compras, limpiar los baños, visitas al médico (De rutina, claro), cambiar las sabanas de todas las habitaciones, revisar los cambios en el jardín…

Jardín… Claro, tal vez si él hubiese sabido antes de que ella en su apretadísima agenda se tomara también un tiempo para apreciar el jardín, hubiese reconsiderado el haber despedido al jardinero.

Volvió a revisar la agenda y se fijo en la hora. Estaba retrasado, otra vez.

“8:45 –Gimnasio (Yoga)” Eso ponía en la agenda.

Eran las 8:50…

Ya a las nueve en punto iba llegando al gimnasio, donde lo regañaron por llegar tarde. Igualmente entro a la clase…

¡¿Qué clase de tortura masoquista era esa!? ¡Era horrible! Simplemente detestable, tenía que pasar segundos que le parecían HORAS en posiciones realmente dolorosas, habían momentos en los que se caía y lo obligaban a levantarse otra vez.

Pero había descubierto lo increíblemente flexible que podía ser el cuerpo de su esposa.

10:00 –Cuidado de TODOS los pokemon de la familia.

///Invernadero///

Si, ella también hacia eso…

En el invernadero donde tenían cada habitad de sus preciados pokemon.
Los había acicalado, dado de comer, lo habían obligado a que jugara con ellos, etc. Cuando había acabado, se dio cuenta de que “raramente” iba retrasado…

10:30 –Hacer las compras que hacen falta.

Tal vez no se hubiese retrasado si supiese, o tuviese una mínima idea de lo que les hacía falta en su cocina. Pero no era ni remotamente consiente, además, con el destrozo que había hecho por la mañana, varias nuevas cosas se tenían que haber sumado a la lista. Tuvo que regresar a su hogar para tomar un baño y luego hacer la lista de todo lo que le hacía falta, solo basándose en lo que no encontraba en el refrigerador o los estantes.

11:00 –En el centro comercial

¿Qué tan sociable podía ser una mujer? Porque en lo que iba del recorrido se había encontrado como a diez “conocidos” (Él no tenía ni idea de quienes eran) Y se había perdido varias veces en los pasillos de aquel inmensísimo edificio comercial.

Aunque “Por alguna extraña razón” las personas eran mucho más amables con él estando en el cuerpo de May, que cuando estaba en el suyo… Sobre todo los hombres, a esos “Desgraciados”, como él desde ese día los había comenzado a llamar, casi se le caía la baba cuando la veían pasar.

Luego de hacer todas las compras y haberlas dejado en su casa, se dirigió hacía su oficina. Aunque ahora sería “la” oficina.

12:30 -Almuerzo con su… ¿Esposo?

Condujo lo más rápido posible, pues estaba retrasado. Esa, por lo menos, era una buena costumbre que tenían ambos. Siempre almorzaban juntos. Claro está en el restaurante que estaba justo al lado de la empresa de él.

Cuando entro al estacionamiento pudo divisar su cuerpo parado mientras zapateaba impacientemente mirando el reloj de muñeca. Detuvo el auto en un parquin y se bajo de este para acercarse rápidamente a su esposa.

-¿Dónde estabas? Llevo media hora esperándote –Le reclamo la peli verde.

-Sí, me retrase un poco, tranquila –Dijo un muy frustrado Drew. Ya que, aunque no fuese a admitirlo, apenas era medio día y ya quería ir a dormir.

-Drew… -Lo llamo ella, a lo que el volteo a verla -¡¿Dónde está mi hijo!? –Grito/Pregunto al ver que el pequeño niño no estaba en ningún lado.

Él se dio una palmada en la frente mentalmente. ¿¡Cómo demonios se le había olvidado ir por su hijo al Kínder!? ¡Se suponía que debía haberlo recogido hace una hora!

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Espero que les haya gustado, no se preocupen. Créanme, se pone mucho mejor

Luego subo la conti =D

Genial capi! X3
Este me llamo la atención en especial =)

WoW Gracias chicas me inspiran para seguir escribiendo

Y pues, se suponia que la subiese hasta mañana (La conti) Pero es que en poco empiezo examenes Y no voy a poder estar actulizando tan seguido. Pero igual! Voy a intentar subir cuantos capis pueda antes de que suceda el horrible acontecimiento. xD

Sin más que decir, acá el siguiente capi.

Antes del capi! Queria decirles que este fanfic lo hice pensando en una manera dramatica de que Drew, May y Shuu se unifiquen más como familia. Y como a mi me encantan los pokemon legendarios voy a poner a varios de ellos en el fic. Por fa avisenme si es "demasiado" el fic o el capi. ¿Ok?

Gracias:


Capitulo cuatro: Una posibilidad de… ¿divorcio? Y una nueva aventura.

Luego de que a “nuestro” querido castaño se le olvidase su hijo, se habían ido de inmediato sin almorzar hacia el centro educativo.

///De camino///

-¿Cómo se te pudo olvidar algo tan importante? –Reprocho la peli verde mirando por la ventana del coche.

-Ya te lo dije, ¿Si? Se me... –fue interrumpido por ella.

-¡No te lo preguntaba a ti! –Le dijo ya mirándolo.

-¿Y a quien? Si se puede saber –Pregunto en tono enojado.

-Se lo pregunte al hombre cariñoso, amable y atento con el que me case –Le respondió con los ojos cristalinos.

-May… -Se había quedado sin palabras, ahora que lo notaba. ¿Qué tan cierto era aquello? ¿Se había pasado los últimos años perdido? ¿O trabajando y dándole importancia en exceso ha, valga la redundancia, su trabajo?

-No digas nada y conduce. –Le ordeno mientras seguía mirando por la ventanilla del coche.

///En una edificación con muchos colores, letras y números///

-Shuu, ¿Estás seguro que te dijeron que iban a venir por ti? –Pregunto como por milésima vez la profesora del pequeño, mientras se subía a su coche –Ya te lo dije, ven conmigo y desde mi casa le damos una llamada a tu mamá. No te puedes quedar aquí tu solito –Le indico con voz suave y armoniosa la señora, ya que, para suerte de ella, Shuu era uno de los niños más inteligentes y “maduros”, por así decirlo, de su salón. El problema es que era el último y ya estaban cerrando.

Él, solo respondió meneando la cabeza hacia los lados.

La señora dio un suspiro, tenía cosas que hacer, Muchas cosas que hacer. Pero por supuesto no iba a dejar a un niño de cinco años en la calle. Pero si se lo llevaba a la fuerza se consideraría como robo infantil.

Iba a decirle algo más cuando vio que por fin se dignaban en aparecer sus padres.

May, en el cuerpo de Drew, corrió rápidamente hasta donde estaba su hijo para levantarlo y estrecharlo en un cálido abrazo.

///Ya en la pequeña mansión (Hogar)///

Se podía apreciar a una pareja sentada en un banco del inmenso jardín. Tenían una bella luna sobre ellos y un cielo completamente estrellado.

-May… -Comenzó diciendo el peli castaño –Cuando regresemos a nuestros cuerpos… Por que estoy seguro de que algún día lo haremos, deberíamos hablar de…

-De nosotros… -Susurro la ex coordinadora, quien se encontraba viendo el hermoso paisaje –Sabia me dirías algo así –Menciono bastante relajada pero a la vez se le notaba un toque de tristeza.

-“Me conoces tan bien” –Pensó el coordinador -¿Sabes? Desde hace un tiempo eh empezado a sentir algo como… una tención, entre nosotros.

-… -Ella enmudeció, enmudeció al sentir como esa horrible discusión se tornaría más violenta, enmudeció al sentir como él se alejaba de ella por cada vez que abría la boca, enmudeció al darse cuenta de que amaba a ese hombre que posiblemente… Y solo tal vez… Ya no quería o ya no soportaba estar con ella.

-¿Quieres… el… divorcio? –Cuestionó ella mirándolo directamente. Jamás, y repito jamás, habían mencionado ninguno de los dos aquellas palabras. Él la miro fijamente. Aún estando en su cuerpo él tenía absoluto dominio en ella, ¿Irónico, no?, No importaba si ella misma se encontraba en posesión de aquellos bellos orbes verdes… El siempre iba un paso adelante… O tal vez dos.

-Eso es… Lo que tú quieres –Más que una pregunta, fue una afirmación. Pero el detalle es que ni siquiera el mismo era consciente del porque de sus palabras.

Ella iba responder cuando un repentino grito llamo la atención de ambos.

-¡Shuu! –Dijo ella mientras se paraba de golpe y corría en dirección a su casa. Él corrió siguiendo a su esposa, pero sinceramente no era lo mismo. Su cuerpo era más pequeño, más frágil. Tal vez eso se le había olvidado con el pasar de los años: La delicadez con la que, cuando eran novios él, la trataba. El como la había enamorado.

Cuando entro por la puerta principal, pudo divisar como ella ya iba por el último escalón de, valga la redundancia, las escaleras y giraba hacia la habitación del pequeño.

De repente sintió un fuerte golpe, se había caído subiendo las escaleras… ¡Pero qué torpe era! Y aún más que esos, por no decir masoquistas, tediosos zapatos de tacón. Se los quito rápidamente y reanudo su marcha hacia su destino.

Cuando llego encontró a su esposa arrojada en el piso y una extraña figura frente a la cama de su hijo… Intento correr hacia donde se encontraba pero una especie de manipulación psíquica se lo impidió. La extraña figura se dio la vuelta y empezó a hablar.

-Yo, soy Mewtwo. Y eh venido aquí para llevarme al príncipe del mar –Ordeno mientras levantaba a su bebe por el aire con su energía –Y tu, humana. No podrás hacer nada para impedirlo.

Y eso fue lo último que recordó antes de sentir una extraña presión en la cabeza y quedar inconsciente.

(/N. A: Pausa aquí, seguro que están confundidos. Pero es que, si recuerdan bien. En la película de Manaphy este cree que May es su madre, entonces. Si cree que May es su madre, el es el hijo del rey del mar, ósea Kyogre ¿No? Y como May es su madre, Shuu es su hermano ¿Ok? Y Mewtwo también cree que como Manaphy es príncipe, por ende Shuu también, Ahora ¡Acción!/)

///Mañana siguiente///

-Mm… -Se empezaba a mecer lentamente el peli castaño desperezándose –Que fue… -luego todos los recuerdos le llegaron a la mente – ¡Shuu! –Grito repentinamente mientras corría a la cama de su hijo… Vacía. –Entonces no fue una pesadilla…

-Drew… cinco minutos más… -Pidió adormilada la peli verde.

-May, May despierta –Empezó a decir mientras corría a ella y comenzaba a moverla –May, Shuu no está.

-¡Shuu! –Casi grito ella de un momento a otro mientras se ponía de pie y se acercaba a la cama. –No puede ser… -Empezaba a soltar unas cuantas lagrimas muy amargas –Drew… ¿Quién ha hecho esto?... ¿Quién haría algo tan horrible? –Cuestiono mientras se acercaba para que la abrazara.

-¿No lo viste? –Pregunto ya “¿estrechándolo?” entre sus brazos –May, necesito que te concentres ¿Si? El extraño pokemon, porque estoy seguro de que era un pokemon. Dijo algo raro ayer. Dime si entiendes lo que significa –Hablaba rápidamente –Cito: “Yo, soy Mewtwo. Y eh venido aquí para llevarme al príncipe del mar”.

-Princip… ¡Príncipe del mar! –Grito ella mientras se alejaba de él – ¡Pero claro! –Dijo mientras empezaba a correr fuera de la habitación y se dirigía a la suya.

-May, May espérame –Decía siguiéndola el peli castaño.

La encontró revolviendo algunas cosas en su habitación. No entendía muy bien lo que pasaba, solo sabía que su esposa había reaccionado ante las palabras del pokemon.

-¡Aquí esta! –Inquirió victoriosa mientras sacaba un pequeño papel de una caja bastante vieja –Drew, mira esto.

Le extendió el objeto a lo que él lo tomo sin vacilar, era una fotografía. Y no solo una fotografía, era una imagen de ella, Ash, Brock y Max de hace casi veinte años. Pero… Había algo extraño… May sostenía un pequeño bulto azul en sus brazos, casi podría afirmar que era un pokemon.

-¿Qué es…? –No lo dejo terminar.

-Su nombre es Manaphy –Respondió rápidamente – Es un pokemon legendario de tipo agua y… Cree, por una serie de sucesos, que yo soy su madre…

El hombre (Atrapado en el cuerpo de ella) La miro como si se hubiese vuelto totalmente desquiciada. Si bien tenía una prueba de la existencia de dicho pokemon, no era una prueba para que alguien creyese semejante… Idea, por no ser grosero.

-¿No me crees? ¡Drew! Si hay alguien que conoce perfectamente a Manaphy y su historia, esa soy yo. Estoy casi segura de que ese tal Mewtwo, quiere a nuestro hijo para llegar a Manaphy.

-… -Le costaba realmente asimilar lo que estaba escuchando… Era tan… Extraño.

-¿Es que acaso… No confías en mí? –Cuestiono triste la oji verde -¡Bien! Si no me crees yo misma iré por él.

Y empezó a caminar fuera, hasta que “él” se lo impidió tomándola de la muñeca.

-Yo… Si confió en ti. Y te creo también –Respondió sonriente, para justo luego darle un dulce beso.

-¡Bien vamos!

Y así ambos se embarcaron en una nueva aventura para recuperar a su hijo, saldar cuentas con un pokemon legendario y descubrir el misterio de los reyes, reina y príncipes del mar…

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Hasta acá el capi =D Recuerden, avísenme si lo sienten "muy, muy" El fanfic. ¿Ok? Gracias Salu2!!!

T.T pobre Shuu! ¿Que le va a pasar? *snif* muy buena historia Gaby_Poky, May y Drew ahora van a buscar a su hijo pero mewtwo es muy peligroso, espero que no se divorcien

espero la conti

SayoO0!!

P.D: nueva lectora

Gomenasai! Gomenasai! Pero es que no habia subido conti porque estoy en examenes v.v

Pero bueno, ya el miercoles se terminan y volvere a las andansas de antes

P.D: gracias por sus reviews.

Otra cosita, Bienvenida a bordo stef_espeon_12 Gracias por leer ^^ Y pues, sin más que decir.

Acá la conti:


Capitulo 5: Una dulce noticia... En un momento abrumador.

-May, ¡espérame! –Decía jadeando un castaño mientras se acercaba al que debería ser su cuerpo.

Rápidamente la peli verde lo silencio haciendo el típico sonido para callar y poniendo un dedo en sus labios.

Luego de haber sellado un pacto en el que prometían rescatar a su hijo por sobre todas las cosas y haberse dado su primer beso desde el intercambio de cuerpos, ambos se habían embarcado en una nueva aventura muy, muy lejos de su hogar. Primero alistaron todas las cosas necesarias, incluyendo ropa de viaje. Lo habían hecho lo más rápido posible. Drew, por su parte había llamado al vice-presidente de su compañía para que, por favor, lo suplantase en su ausencia. El cual acepto, extrañado de escuchar la voz de May del otro lado del teléfono.

Habían llegado hasta cerca del lugar donde May vio por última vez aquel inmensísimo templo del mar. May le había explicado a Drew todo lo que tuviese que saber sobre su aventura con Manaphy. Y que, en poco tiempo, se iba a repetir una vez más. Pero tenían que esperar hasta la luna llena para que la construcción se hiciese visible.

Luego de haber acampado un poco, las estrellas empezaron a brillar en lo alto del cielo. Eh iba a comenzar la travesía.

-¿Y una vez que ese templo aparezca… Como haremos para llegar hasta allí? –Pregunto el hombre semi-escondido tras unas enormes rocas frente al mar.

-Muy fácil… -Susurro la mujer mientras juntaba sus dedos (Pulgar y corazón) y los metía a su boca para dar un largo silbido. Casi de inmediato escucharon un fuerte rugido proveniente del mar. Mientras, a lo lejos, se veía una sombra viajando a gran velocidad hacía ellos. Cuando estaba casi enfrente, una aleta gigantesca salió del agua para golpear el agua (Como lo hace una ballena) Y pudieron distinguir el singular color azul proveniente del pokemon.

-Kyogre… -Murmuro para sí mismo Drew.

-Si… Desde que Manaphy cree que soy su madre me ha tomado como que cierto cariño –Menciono juntándose de hombros, restándole importancia. Aunque a su esposo no le hizo mucha gracia.

El gigantesco pokemon se acerco a ellos mirándolos con sus inmensos y penetrantes ojos dorados.

Luego de un intercambio de palabras (Solo May hablo y le explico todo) Él “acepto” ayudarlos, se montaron en su lomo y emprendieron el recorrido. Varias horas pasaron antes de que pudiesen divisar su objetivo.

-Es ahí –Más que un cuestionamiento, fue una afirmación la que hizo Drew. Kyogre los dejo justo donde se podía anclar en la parte frontal del templo.

-Bien, ahora solo hay que buscar a Mewtwo –Susurro May mientras entraba al lugar.

-¿No tienes ni idea de donde podría estar? –Cuestiono el hombre.

-Si… Bueno, no… Bueno, tal vez. –Dijo torpemente la peli verde. A lo que su esposo solo atino a alzar una ceja en forma interrogativa, ella al ver este gesto comento: -Es que la última vez que estuve aquí, había una habitación gigantesca en la que estaban los cristales del mar. Y pues, me parece que era el salón principal.

-Entonces allí debemos buscar… -Mientras empezaba a caminar.

-Drew… -Lo llamo, a lo que él detuvo su recorrido –Tengo hambre –Dijo con cierto sonrojo. A lo que el sonrió. Ella podía ya ser madre y esposa, pero lo tierna jamás se le iba a ir.

-Tienes razón, ya hasta me estaba mareando por el hambre. Tu cuerpo no resiste nada ¿Eh? –Interrogo en forma de broma el hombre. A lo que ella hizo un puchero, que a él le pareció adorable.

-Pues bien, Señor Todo lo puedo Lord. ¿Qué sugieres? –Pregunto “Enfadada”.

-Señora, por favor –Menciono para luego dar una carcajada al aire. Ella por su parte, al comprender la broma, también empezó a reír alegremente. Dándose así un pequeño aire antes, ya que no habían descansado muy bien por la noche.

-Bueno, aunque tengo que admitir que tu cuerpo es mucho más resistente –Asiendo énfasis en “mucho”.

Luego de otro pequeño dialogo y habiendo solucionado un poco más las cosas, ambos decidieron que era mejor continuar con su recorrido, varias travesías acontecieron en el camino, enfrentamientos y demás. Las horas pasaban y cada vez se acercaban más a su objetivo.

En un momento dado, justo en un inmenso corredor, por alguna razón, ambos se empezaron a sentir muy cansados. Al ser el cuerpo de May mucho más liviano y frágil que el de Drew, el mismo calló de rodillas sin poder sostenerse más.

-¡Drew! ¿Qué ocurre? ¿Te encuentras bien? –Interrogo muy preocupada su esposa.

-Estoy bien, solo es que… Estoy muy cansado. Bueno estas piernas ya no pueden más. –Menciono algo abatido el hombre.

-En realidad, nunca fui tan fuerte como aparentaba –Susurro algo triste ella.

-No te preocupes, cielo. Estoy bien. –Afirmo comprensivamente el chico.

-Gracias, deberíamos descansar.

-Pero… hay algo que quería decirte… -Dijo mientras miraba seriamente a su mujer. –Me eh sentido… Un poco… “Extraño” últimamente, no sé cómo explicarlo, pero… Creo… Creo que estas…

Y así como si se hubiese detenido el tiempo May escucho la palabra “Embarazada” muy lejanamente.

Continuara…

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Muajajajajajajja Soy cruel

Espero que les haya gustado. Y todavia alguien me siga leyendo

Con suficientes reviews, luego subo la conti !!! =D

OH!!!! Gaby_Poky no puedo creerlo ¿Nos dejas así? ó.ò hay que mal... mucha curiosidad... preguntas... *snif* estoy realmente ansiosa por la siguiente conti!!! ^o^

Espero la conti

SayoO0!!

P.D: Gracias, prometo seguir el fic ^^